La gota se produce principalmente por un trastorno metabólico en el que las sales de ácido úrico comienzan a depositarse en las capas profundas de la piel, formando tofos (nódulos) dentro de las articulaciones, causando dolor, inflamación e interfiriendo con los movimientos. Es una enfermerdad crónica, periódica en la que no solo se prescriben medicamentos, sino también fisioterapia. Los procedimientos se realizan en un complejo con un número determinado de sesiones.
La gota, que se llama la “enfermedad de los aristócratas”, es más común en los hombres de poco más de 40 años y, menos común en las mujeres.
Causas y síntomas de la gota.
La gota pertenece al grupo de las artritis. La artritis se refiere a cualquier enfermedad de las articulaciones. El término “gota” se usa cuando se habla de la deposición de sales de ácido úrico en varios tejidos del cuerpo, con mayor frecuencia en las articulaciones y el cartílago.
Las sales de ácido úrico (uratos) se depositan en las articulaciones, especialmente en las pequeñas, destruyéndolas gradualmente. La deposición de sal es más susceptible a las articulaciones lesionadas. La articulación del dedo gordo del pie se convierte en el objeto de la lesión debido a que llevamos zapatos incómodos y estrechos. La gota también puede conducir a la formación de cálculos renales, que a su vez pueden provocar insuficiencia renal, que en algunos casos puede ser fatal.
Los síntomas de la gota pueden incluir:
- dolor agudo en las articulaciones (especialmente después de comer comidas pesadas o grandes cantidades de alcohol). A veces, las sensaciones son tan insoportables que duele incluso por el hecho de que una sábana yace sobre el brazo o la pierna. El dolor comienza a atormentar por la noche, pasa durante el día y luego regresa nuevamente. Esto puede llevar varios días o incluso meses;
- enrojecimiento e hinchazón de la articulación;
- un aumento de la temperatura en el área de la articulación hasta;
- fiebre;
- Debilidad general.
Si los ataques se repiten una y otra vez, entonces, por ejemplo, la gota del dedo del pie puede ir a otras articulaciones, haciéndolas dolorosas e inactivas.
La gota se considera una enfermedad de adultos mayores, pero debido al hecho de que una persona moderna consume muchas grasas y alcohol, en particular cerveza, esto conduce a un “rejuvenecimiento” de la patología. La enfermedad es crónica, es decir, no se puede curar por completo. Pero para evitar consecuencias graves, se debe recurrir a una terapia que detenga o ralentice el proceso de destrucción de las articulaciones.
La eficacia de la fisioterapia para la gota.
Las enfermedades son en su mayoría hombres, y no tanto por la fisiología, sino por el estilo de vida, pero las mujeres también pueden padecer tal dolencia. Se requiere terapia, porque la enfermedad es extremadamente difícil de tolerar y causa dolor severo en el paciente. Pero, desafortunadamente, no es posible mejorar la patología para siempre. Los médicos recomiendan ser tratados con medicamentos, recurriendo a consejos populares y fisioterapia para la gota.
La eficacia de la fisioterapia ha sido probada en la práctica. Contribuye a la restauración de los tejidos cartilaginosos de la articulación afectada, detiene su deformación. Gracias a tales medidas, el dolor desaparece, la intensidad de la enfermedad disminuye, es más fácil para el paciente soportar los ataques de gota.
La fisioterapia te permite:
- aliviar el dolor;
- suspender o ralentizar significativamente los procesos de deterioro del cartílago;
- Evitar la aprición de secuelas
De esta manera, la fisioterapia en casos de personas que padecen de gota se basa en proporcionar herramientas terapéuticas para disminuir síntomas, por lo que sus técnicas incluyen las siguientes:
- Movilizaciones activas y pasivas de acuerdo a la movilidad articular.
- Las compresas frías pueden ayudar a disminuir el dolor, sobre todo cuando es agudo y persistente.
- Electroterapia para lograr analgesia y para estimular a nivel muscular.
- Ejercicios de suaves a moderados de acuerdo a los síntomas y al avance de la enfermedad. Además con estas intervenciones se logran diversos beneficios para la salud en general.
- Estiramientos lentos y en los grupos musculares que lo requieran para evitar otras lesiones.
- Automasajes y masajes suaves para aumentar la temperatura y aliviar tensiones.
- Existen casos que se pueden indicar órtesis para evitar deformidades.
- Técnicas de terapia manual.
Se debe tener en cuenta que durante un ataque agudo de gota, la articulación debe descansar y guardar reposo, por lo cual la fisioterapia no está indicada.